El gran avance en nuevas alternativas de energía se concentra en el cuerpo. El derroche de energía através de sus movimientos puede no ser suficiente para alimentar a su casa, pero si la carga de tu móvil y algo más en la próxima década
Fuente: The Sustainable Dance
El cuerpo humano contiene enormes cantidades de energía. De hecho, el adulto promedio tiene la mayor cantidad de energía almacenada en grasa, algo parecido a una tonelada de baterías. Se están orientando las investigaciones para aprovechar el potencial del cuerpo.
El movimiento produce energía cinética, que puede convertirse en eléctrica. Entre los dispositivos conocidos que convierten la energía cinética en electricidad, nos encontramos con el viejo dinamo de la bicicleta que alimenta los faros. Esta visión ofrece nuevas oportunidades para aprovechar nuestra energía incluso sin darse cuenta.
Consideremos, por ejemplo, un gimnasio. Con cada paso que usted toma en un escalador, bicicleta fija, la cinta al caminar o de correr, que a su vez los excedentes de calorías se podrían conducir a un generador y producir electricidad. La energía de una persona en ejercicio no puede ser mucha, pero 100 personas podrían contribuir significativamente a la generación de la energía necesaria.
Esa es la idea detrás de los Green Microgym en Portland, Oregon, donde las máquinas como las bicicletas fijas recolectan energía durante los entrenamientos. El pedaleo se vuelve un generador, que ayuda a la producción de electricidad para alimentar el edificio. Por ahora, los suministros de energía corporal son sólo una pequeña fracción de las necesidades del gimnasio, pero la cantidad debería aumentar a medida que más gimnastas se sumen a las máquinas. "Al ser alternativas muy eficientes de energía, si combinamos: la potencia, la energía solar y eólica algún día, creo que seremos capaces de generar un gasto cero de electricidad de la red", dice el propietario del gimnasio, Adam Boesel...
En los Países Bajos, el nuevo club de Rotterdam WATT tiene una planta que aprovecha la energía creada por los pasos de sus bailarines. Diseñado por una empresa holandesa denominada Sustainable Dance Club, el principio se basa en el efecto piezoeléctrico, ciertos materiales producen una corriente eléctrica cuando se comprimen o doblaban. (El ejemplo más común es un encendedor de cigarrillos, en la que un martillo provoca una chispa que se emite cuando se golpea un cristal piezoeléctrico.) Cuando los bailarines danzan, se comprime por lo menos media pulgada, haciendo contacto con el material piezoeléctrico genera en virtud de éste de 2 a 20 vatios de electricidad, dependiendo de los diferentes impactos de los pies. Por ahora, no es más que suficiente para las luces LED de alimentación en el piso, pero en el futuro, se espera una mayor producción de nuevas tecnologías. En Londres, Surya, una nueva eco-discoteca, utiliza el mismo principio para su pista de baile, los propietarios esperan un día generan el 60 por ciento de la electricidad en el club. Esta pista ingreso en el ranking de los “Best of Green Design 2008”