Max Donelan del laboratorio de locomoción de la Universidad Simon Fraser de Columbia Británica, en colaboración con investigadores de América y Canadá, está desarrollando un generador electromagnético montado en una rodillera.
Fuente: locomotion lab
El prototipo que Donelan reveló el pasado mes de febrero, convierte 1 minuto de caminata a pie en suficiente corriente para media hora de conversación de un teléfono móvil.
El generador utiliza una sofisticada rodilla electrónica, para asegurarse de tomar sólo el exceso de energía, mientras una computadora mide el ángulo de la rodilla en cada paso para determinar la separación y el momento activar el generador. La electricidad fluye a través de un cable para cargar una batería o dispositivo. Con más de 1.360 kg., el generador, llamado Recolector Biónico de energía, es engorroso. Pero gracias a los engranajes más ligeros y un marco hecho de materiales ligeros como fibra de carbono, el último modelo, que se espera en el próximo año, debe pesar más cerca de una libra o en 450 gramos, además una microcomputadora sustituirá a un ordenador que se conecta a la unidad en el actual prototipo.
Dicho dispositivo tiene muchos usos posibles. Los militares canadienses financiaran parcialmente la investigación porque los soldados suelen llevar hasta 15 kg. de baterías para el equipo de navegación y comunicaciones, una carga que podría aliviarse mediante una fuente de energía alternativa. En el futuro, los miembros artificiales que requieren de pilas pueden ser diseñados con la tecnología de Donelan. Y la próxima generación de dispositivos puede ejecutar los gadgets como teléfonos móviles, sistemas de posicionamiento global, iPods y cámaras digitales. Esto podría ser particularmente útil para excursionistas y escaladores, que pasan gran parte de su tiempo lejos de fuentes de energía.